Somos los amateurs del Poder de la Política, retirándolo de los “profesionales” que cabalgan aún sobre la ilusión del escenario del teatro político tradicional.
Sí Platón y Aristóteles eran esclavistas, Dostoievski reaccionario, Celine antisemita, Heidegger un miembro del partido nazi. Reconozcamos las complejidades y las contradicciones humanas.
Edgar Morin